La Basílica Papal de Santa María la Mayor, es una de las
cuatro basílicas mayores y una de las cinco basílicas patriarcales. Es la única
que mantiene la planta basilical y la estructura paleocristiana primitiva. El
alzado no se mantiene en su estado original debido en gran medida al terremoto
de 1348.
Tras la estancia de los papas en Aviñón, esta basílica se
convirtió en la residencia temporal debido al mal estado del Palacio de Letrán.
Posteriormente se instalarían en la sede del Vaticano. Al igual que en San Juan
de Letrán, también se encuentran sepultados varios papas.
Su construcción fue encargada por el Papa Liberio en el
lugar donde se produjo una aparición de la Virgen María ante un patricio romano
y su esposa. Posteriormente el papa Sixto III ordenó la construcción de la
actual iglesia con tres naves separadas por columnas jónicas de fuste liso en
mármol veteado ateniense que sostienen un entablamento clasicista para separar
las naves laterales de la central. Fue ampliada y restaurada durante la Edad
Media.
Destacan los mosaicos dedicados a la Vida de la Virgen que
se encuentran en el arco triunfal, que datan del siglo V y estilo bizantino.
Muestran escenas de la infancia de Cristo. También medieval es el suelo de
mármol y el campanario de 75 metros de altura.
Del siglo XIV es el mosaico del ábside con la Coronación de
María. El artesonado es renacentista, del siglo XVI, mientras que la mayor
parte de los altares, las fachadas y las cúpulas fueron renovadas entre el siglo XVII y el
XVIII.
En la nave de la derecha destaca la Capilla sixtina, lugar
de enterramiento del papa Sixto V y de Pío V. Fue trazada por Domenico Fontana.
La capilla paulina, fue mandada construir por el papa Paulo
V, con cruz griega, a modo de pequeña iglesia para ser su lugar de enterramiento.
En ella además se encuentra la tumba de Clemente VIII. Los frescos de la cúpula
se deben a Guido Reni.
En la capilla Borghese se encuentra la tumba de Paulina
Bonaparte, la hermana de Napoleón. Destaca el bajorrelieve del frontispicio,
obra de Stefano Maderno.
Bajo el santuario de la Basílica de Santa María la Mayor
está la cripta de Belén o gruta de la Natividad, donde se encuentran enterradas
figuras destacadas de la historia católica. Tiene un altar y asientos para
celebrar la eucaristía. Aquí se guardan la reliquias de fragmentos de madera y
brizna de la paja de la Santa Cuna que se cree utilizada en la Natividad de
Jesús. Además se encuentra la tumba de San Jerónimo, uno de los padres de la
iglesia, así como el cuerpo de Gian Lorenzo Bernini (a la derecha del altar).